Conformación de los bandos

En la Primera Guerra Mundial, los nuevos bandos se formaron a través de alianzas y tratados políticos. La Triple Entente, inicialmente compuesta por Francia, Rusia y Reino Unido, se amplió con la entrada de otros países, incluidos Italia, Japón, Serbia, Bélgica, Grecia, Rumania y Estados Unidos. Por otro lado, las Potencias Centrales, formadas por Alemania, Austria-Hungría y el Imperio Otomano, vieron cambios en su alianza con la salida de Italia y la incorporación de Bulgaria. Varios países neutrales, como Suiza, Suecia y España, optaron por mantenerse al margen del conflicto. La conformación de los bandos evolucionó a lo largo de la guerra debido a cambios en las alianzas y los acontecimientos en el campo de batalla. 










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